Cuando el vino del Empordà se convierte en tu crema hidratante - El Periódico
Se prometieron que nunca trabajarían juntos y al final la pareja formada por Laura Berzal y Roger Guasch acaban de asistir al nacimiento de su propia marca de cosmética consciente, natural y vegana. La idea de Natana nació en un viaje a Londres, como recuerda el exdirectivo del Espanyol. "La semilla surgió antes de la pandemia, durante una estancia en la capital del Reino Unido. Al salir de la estación de King's Cross entramos en una tienda de la cadena de cosmética natural Aesop. Nos gustaba mucho su filosofía, el producto de calidad que tienen y cómo lo presentan, y pensamos en la posibilidad de hacer un proyecto propio similar. Yo había acabado mi etapta de CEO en el club, y nos hicimos un nuevo planteamiento de vida".
Se conocieron cuando ambos trabajaron en Chupa Chups, Laura en la parte nacional y Roger, en la corporativa. Después sus caminos profesionales se separaron hasta principios del 2020, cuando en aquella tienda decidieron aprovechar la dilatada experiencia en márketing de ella y la formación en el ámbito de la ingeniería química y los años en el sector farmacéutico y cosmético de él, para poner en marcha algo nuevo en un sector con cada vez más tirón, el de la cosmética natural .
"Nos dirigimos a aquellas personas que, si bien demandan cada vez más una cosmética natural, sostenible y con valores sociales, al mismo tiempo también reclaman que sea eficaz, ya que la cosmética natural por sí sola no es lo suficientemente eficaz para el cuidado de la piel", asegura Laura, que confiesa haber probado muchas marcas y productos. "Algunos es normal que a los jóvenes les encanten porque en realidad no necesitan nada. Yo tengo 45 años y necesito unos activos y unos productos que funcionen. Quería cremas que me compraría para mí. Y los comentarios de la gente que los está probando son que notan una piel luminosa, muy hidratada durante horas".
"Lamentablemente los cosméticos naturales por sí solos no me aportaban la eficacia que buscaba, así que hemos formulado nuestra propia gama , con una elevada naturalidad y calidad de sus activos para que aporten esa eficacia en la piel desde el principio", relata Berzal, que cifra entre el 93% y el 99% la eficacia de los siete productos que desde octubre se pueden comprar solo 'online', a través de la web y de la página de Instagram de la marca . "De los siete productos que hemos sacado ahora, cinco llevan nuestro propio activo que hemos extraído de la uva. Son una crema hidratante, un sérum, un jabón, un contorno de ojos y el agua micelar. Los otros son dos mascarillas que no pueden admitir en su fórmula ese activo", cuenta Roger. "Desde el principio tuvimos claro que queríamos apostar por el 'upcycling' o economía circular . El primer activo propio de Natana obtenido a través de este proceso proviene de la primera fermentación de la uva para la elaboración del vino, el denominado 'Lees concentrated'.
"Yo había leído bastante de este tema. Casualmente tenemos unos conocidos que tienen una bodega, Vins de Taller, que está en Siurana, en el Alt Empordà, a nueve kilómetros de Figueres (Girona). Es una cava ecológica y biodinámica donde se tienen en cuenta hasta las lunas. La vendimia en Vins de Taller comenzó el 15 de agosto y se recogieron diferentes variedades: garnacha gris, garnacha blanca, monastrell...
"Nosotros extraemos las lías -las levaduras muertas, bacterias y una serie de sustancias procedentes de la uva que quedan residuales tras la fermentación- justo después de la cosecha", cuenta Roger. Estos posos o lías son un subproducto que habitualmente se utiliza como abono o bien se lleva a alcoholeras para la extracción de alcohol, pero Natana usa estos lodos convertidos en postbiótico rico en antioxidantes porque son muy beneficiosos para el cuidado de la piel. "Nos hemos dado cuenta de que el poder antioxidante venga de una variedad o de otra es igual prácticamente, pero intentamos seleccionar uva blanca porque así el color final del producto es lo más claro posible", relata el empresario.
Luego, concretamente el pasado 2 de noviembre, a ese producto se le puso un conservante natural para que no se oxidara. "Lo llevamos a un laboratoriocon el que trabajamos y con el que hemos desarrollado una metodología, y en unos 20 días se obtiene el extracto para los productos que fabricaremos en 2022", afirma Roger.
Aunque Natana acaba de echar a andar ya tiene en proyecto una nueva línea cosmética para el próximo año, también basada en la sostenibilidad y el 'upcycling' . Esta vez serán subproductos como los surgidos al elaborar aceite , en este caso con origen en Andalucía . "En España hay elementos de referencia mundial y la obtención de productos de alto valor añadido también puede tener un reconocimiento significativo y ayudar a potenciar la economía después de esta pandemia", expone Guasch, que avanza en qué consistirá la nueva línea.
"Seguiremos ampliando la línea facial. En el primer cuatrimestre queremos sacar una crema de alta calidad y un 'buster' 'antiaging' , para un 'target' 45-55, y un exfoliante , y después de vacaciones, saldrá la gama de tres productos capilares , y antes de Navidad, un 'pack' antimanchas : vitamina C, retinol y una crema con factor solar incorporado", avanza Laura.
Como en el resto de productos, seguirá mandando otro eje central de la filosofía de la marca : el menos es más . "Para que un producto funcione no hace falta ponerle más si no es necesario", dice Laura, que habla de las bondades del jabón facial en polvo . "La gracia es que se activa mojándote las manos y con un bote de 50 gramos equivale a un litro de jabón convencional", cuenta con orgullo. "Queremos construir la sostenibilidad poco a poco, aportar nuestro granito de arena", asegura Roger, que pone de relieve otro de los valores de Natana, la elaboración en frío para minimizar la huella de carbono. Además, los dos fundadores se sienten muy satisfechos de adherirse al movimiento 'Conscious Beauty' (cosmética consciente).
"Nos hemos sumado a los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU para 2030. Nos sentimos especialmente motivados en promover proyectos de educación en ámbitos cercanos y de nuestra comunidad", sostiene Guash, que ya avanza: "Si el proyecto sigue siendo sostenible, y va todo bien, la idea es dedicar un porcentaje de los beneficios del 2022, aún sin determinar, por ejemplo,
6.000 euros, por decir algo, a un aula de estudio de Sant Andreu, La Mina o el Raval, o donde sea, o Vallecas . Para nosotros eso es más provechoso que dedicar ese dinero a plantar árboles en el Amazonas".
Artículo de El Periódico